Jagualácticos/as todo el año nos podemos encontrar expuestos a altas temperaturas, especialmente si vivimos en climas tropicales, y esto pueden poner en riesgo nuestros dispositivos, pues el calor es uno de los principales enemigos de las baterías que llevan los smartphones, wearables, tabletas o computadoras.
Por esa razón, aquí tienes algunas recomendaciones para cuidar al máximo tus gadgets durante todo el año.
NUNCA CARGUES EL CELULAR EN ALGUNA ZONA CALIENTE
El calor es uno de los grandes enemigos de las baterías de los teléfonos, tabletas, laptops y otros productos que utilizan las clásicas baterías de ion-litio, por esa razón, equipos como el HUAWEI nova 11 Pro utilizan IA junto con un sistema de enfriamiento por grafeno que busca regular rápidamente la temperatura cuando el equipo se calienta. Sin embargo, con altas temperaturas es recomendable tener cuidado con dónde dejas el teléfono o cualquier otro gadget mientras se carga.
La recomendación es evitar que el dispositivo se cargue mientras el sol pega directo a él, o bien, que lo coloques en una superficie que ya está caliente debido a los rayos del sol. Hacer esto hará que la temperatura durante el proceso de carga aumente. Asimismo, en teléfonos que usan HUAWEI SuperCharge Turbo, como el HUAWEI P60 Pro, o los HUAWEI nova 10 y 11 Pro, es recomendable no utilizar esta opción si hay mucho calor en el lugar donde vas a cargar el dispositivo, pues cargar el dispositivo a 88W o 100W también hace que la temperatura interna aumente.
Es aconsejable evitar utilizar esta opción en caso de que el entorno de carga esté experimentando altas temperaturas, ya que tanto la carga a 88W como a 100W pueden contribuir al aumento de la temperatura interna del dispositivo.
Además, es crucial recordar siempre emplear el cargador original proporcionado con el dispositivo. Esto es especialmente relevante en el caso de equipos equipados con HUAWEI SuperCharge, ya que estos incorporan un chip diseñado por Huawei que posibilita la comunicación a través de un protocolo de carga inteligente (SCP). Esta comunicación tiene como finalidad adaptar automáticamente el voltaje y la corriente de carga para lograr una carga más rápida y eficiente, teniendo en cuenta el tipo de dispositivo y el nivel de batería.
Adicionalmente, este enfoque busca asegurar la protección de carga en diversas etapas del proceso, abarcando desde el puerto USB-C hasta la batería. En cada una de estas fases se aplican mecanismos de protección que regulan la tensión, la corriente y la temperatura, garantizando así una carga segura y contribuyendo a prolongar la vida útil de la batería.
NO SUMERJAS EN EL MAR TU EQUIPO
La mayoría de los teléfonos de Huawei incorporan algún nivel de resistencia al agua, lo que implica que pueden soportar la exposición al agua sin temor a sufrir daños. Algunos modelos incluso poseen la capacidad de ser sumergidos durante un tiempo y a una profundidad específica sin experimentar inconvenientes. Por ejemplo, el HUAWEI P60 Pro es capaz de mantener su funcionamiento hasta a una profundidad de 6 metros durante 30 minutos sin sufrir daños.
Es importante destacar que esta resistencia al agua está evaluada en condiciones de agua dulce. Por lo tanto, no se recomienda sumergir estos teléfonos en agua de mar. Si vives en una zona costera o participas en actividades acuáticas, es recomendable evitar nadar con el teléfono. No obstante, ello no implica que un breve contacto con el agua marina resulte en un mal funcionamiento inmediato del teléfono. La capacidad de resistencia dependerá del grado de protección IP contra el agua con el que cuente el dispositivo. Aunque pueda resistir un breve contacto con el agua del mar según su clasificación, sumergirlo completamente es un escenario distinto que puede comprometer su integridad.
Recuerda que a diferencia de los smartphones, los wearables de Huawei como el HUAWEI WATCH Ultimate, HUAWEI WATCH 4 Pro o varios equipos de la familia HUAWEI WATCH GT son resistentes al agua de mar, y pueden sumergirse a distintas profundidades, por ejemplo, el HUAWEI WATCH Ultimate es capaz de resistir la presión hasta 100 metros de profundidad.
Mientras que en los teléfonos es común encontrar la resistencia al agua y polvo basándonos en su protección IP, en los smartwatches también se incluyen ciertas normas de protección que los dota de una protección mayor a la inmersión. Como lo mencionamos, en las especificaciones de los smartwatches y smartbands también vas a encontrar su nivel de resistencia IP, pero adicional tendrás otro tipo de protección que les permite sumergirse en agua dulce y salada a una profundidad y tiempo mayor en comparación con los productos que solo cuentan con protección IP68
